viernes, 7 de agosto de 2020

SEAMOS RESILIENTES

 

Paz interior, eso necesitamos.


¿SABES QUE ES LA RESILIENCIA?

La resiliencia es la capacidad que tiene una persona para recuperarse frente a la adversidad para seguir proyectando el futuro. Los especialistas afirman que la resiliencia está vinculada a la autoestima, por lo que es importante trabajar con los niños desde pequeños para que puedan desarrollar sanamente esta capacidad.

Durante toda nuestra vida nos enfrentamos a muchos desafíos y está en nuestras manos salir de ellos. Cuando somos resilientes sabemos que hacer o como reaccionar ante cada situación, Ya que manejamos muy bien nuestros sentimientos y emociones.

Antes de todo te invito a ver un video sobre este tema.

Este video nos ayudara a entender un poco mejor este tema.

QUEREMOS MANEJAR NUESTRAS EMOCIONES.

A continuación, te presento 10 maneras de ser mas resilientes.

1. Cree de manera positiva en tus habilidades

La autoestima está comprobado que juega un papel muy importante en afrontar el estrés y recuperarse de acontecimientos difíciles. Recuérdate habitualmente sobre cuáles son tus fortalezas y logros.

Convertirte en alguien más confiado sobre tu propia habilidad de responder y manejar las crisis es una manera inmejorable de construir futura resiliencia.

 

2. Encuentra un sentido y propósito a tu vida

En ocasiones el hecho de enfrentarnos a una tragedia o mal momento, nos motiva a buscar y a encontrar un sentido a nuestra existencia, lo que puede tener un papel muy importante en nuestra recuperación.

Esto puede incluir el involucrarse más en nuestra comunidad, cultivar nuestra espiritualidad o participar en actividades que sean significativas para uno mismo.

 

3. Desarrolla una amplia y sólida red social

El tener personas capaces de dar afecto y soporte alrededor de uno, actúa como un factor de protección en tiempos de crisis.

Así, es importante el tener personas en las que uno pueda confiar. Simplemente hablando sobre una situación complicada con alguien a quien estimemos y nos tenga estima no hace que el problema se vaya, pero el compartir estos sentimientos, obtener ayuda, recibir feedback positivo y encontrar posibles soluciones conjuntamente, es de mucho valor.

Por cierto esta lectura estoy seguro de que te va a gustar; es una pequeña delicia: Tres amigos en busca de la sabiduría.

 

4. Di sí al cambio

Ser flexible es un parte muy importante de la resiliencia. Aprendiendo como ser más adaptables, estaremos mejor equipados a la hora de responder a una crisis vital. La gente resiliente frecuentemente utiliza estos acontecimientos como oportunidades de moverse en direcciones diferentes.

 

Mientras algunas personas pueden romperse con cambios súbitos y fuertes, los individuos altamente resilientes pueden ser capaces de adaptarse y seguir adelante.

 

5. Cultiva de manera activa tu optimismo

Permanecer optimista durante periodos complicados puede ser difícil, pero mantener un punto de vista esperanzado es una parte saliente de la resiliencia.

Pensar en positivo no implica ignorar el problema y sólo focalizarnos en soluciones positivas. Lo que nos quiere motivar es a comprender que los obstáculos son transitorios y que uno posee las habilidades para enfrentarse a ellos (y que aunque no los tenga los puede desarrollar).

Con lo que uno se enfrenta puede ser difícil, pero es importante permanecer con un halo de optimismo sobre un futuro donde también ocurran cosas buenas.

 

 6. Cuídate, nútrete, acompáñate

Cuando estamos estresados es fácil que no nos cuidemos tanto y dejemos de lado nuestras propias necesidades, haciendo menos ejercicio y no durmiendo lo necesario; estas son reacciones comunes a las crisis personales.

Centrándote en seguir desarrollando tu autocuidado es importante, especialmente cuando ha pasado algo negativo.

Organízate y saca tiempo para hacer actividades que te gusten. Cuidando de tus propias necesidades, puedes darte un empujón para mejorar tu salud en general y tu resiliencia en particular y así afrontar con garantías tus retos vitales.

 

 7. Desarrolla tus habilidades de solución de problemas

La investigación psicológica nos dice claramente que aquellos que pueden sacar diferentes soluciones a un problema serán capaces de afrontarlo mejor que aquellos que no. Cuando te enfrentes a un nuevo reto, haz un listado de algunas de las soluciones potenciales al mismo.

Experimenta con diferentes estrategias y céntrate en desarrollar una vía para aquellos problemas más comunes. Practicando tus habilidades de solución de problemas de manera regular, estarás mejor preparado para encarar aquellos retos futuros más difíciles.

 

8. Proponte metas

Los momentos de crisis en ocasiones parecen irremontables. Las personas resilientes son capaces de ver estas situaciones de manera realista, y entonces se fijan objetivos razonables para afrontar el problema.

 

Cuando te encuentres a ti mismo abrumado por una situación determinada, céntrate en afrontar cada cosa a su momento, de lo más urgente a lo más importante. Haz una lluvia de ideas de las posibles alternativas, y diseña los pasos a seguir para conseguir estas metas.

Si tienes dificultades para ello, esta es tu lectura: Guía práctica para establecer y conquistar metas efectivas.

 

9. Da pasos para solucionar el problema

El hecho de esperar a que pase la dificultad suele prolongar las crisis. En vez de eso, comienza a trabajar en resolver ese asunto de manera inmediata. Puede ser que no haya una solución fácil o pronta, pero siempre hay alternativas posibles para hacer esa coyuntura mejor y más sobrellevable.

¿La clave? Centrarse en los progresos que ya hayas hecho y planificar los pasos siguientes, más que descorazonarse por la cantidad de trabajo que aún debes hacer.

 

10. Sigue trabajando en tus habilidades

La resiliencia puede llevar un tiempo para ser construida, por lo que no te desmotives si sigues teniendo situaciones que te causan problemas. En realidad, la resiliencia no es algo extraordinario que solo pocas personas poseen, si no que puede ser aprendida por casi todos.

La resiliencia psicológica no engloba una serie específica de acciones concretas, si no que puede cambiar sobremanera de una persona a otra. Eso sí, el practicar algunas de las características comunes de la gente resiliente nos lleva a desarrollar nuestras ya existentes fortalezas, como también nos explica la Psicología Positiva


No hay comentarios.:

Publicar un comentario